El expresidente Álvaro uribe reconoció en un comunicado este sábado que "indagaciones preliminares en la justicia me indican que alguien que trabajó en mi Gobierno sería uno de los beneficiarios de los sobornos de Odebrecht en Colombia, además de personas del Gobierno actual".

Uribe, que había pedido celeridad al presidente Santos sobre investigaciones frente a los hechos, indicó que "tan pronto tenga más información la comunicaré con el pedido de la más severa sanción al responsable o responsables".

Recalcó que en su "Gobierno los contratos se discutían y adjudicaban en audiencia pública. El ministro Andrés Uriel Gallego, ya fallecido, me acompañó con absoluta pulcritud durante el ejercicio de la Gobernación de Antioquia y de la Presidencia".

"Nuestro contrato de Ruta del Sol, tramo dos, fue acompañado por la Agencia de Financiación del Banco Mundial y tuvo toda la deliberación pública con la participación de los proponentes", expresó el hoy senador.

El comunicado firmado en Rionegro, Antioquia, con fecha 24 de diciembre, se lee que "conocida la información internacional, el actual Gobierno ha guardado silencio sobre cambios de trazado, adiciones contractuales, navegabilidad del rio Magdalena y otros, que se podrían sumar a la lista de su corruptela en venta de Isagen, construcción de Reficar y Bioenergy, Saludcoop, Caprecom, pagos del narcotráfico a asesores del Gobierno, sobornos a políticos y a operadores de justicia, a periodistas con contratos y la adjudicación del Canal Uno a un único proponente, integrado por dos amigos del Presidente".

Y añade finalmente: "La reunión del Presidente Santos con el directivo de Odebrecht en 2015 se sucede cuando ya se conocían los escándalos de esta compañía en Brasil y en otras partes".

"Este caso nos permitirá hacer una distinción entre la persecución política sufrida por muchos de los nuestros y la repugnante corrupción", puntualizó el expresidente.